Los nuevos juguetes de dudamel

Se acabaron las vacaciones, volvió el fútbol. Es que casi todos sabemos que finalizó el Torneo Apertura del balompié venezolano, y los equipos nacionales se fueron de vacaciones, los jugadores a pasar las fiestas con sus familiares, mientras los cuerpos técnicos y los directivos, a diferencia de estos, hicieron lo mismo pero también aprovecharon para analizar, buscar y concretar refuerzos a sus plantillas. El conjunto crepuscular no fue la excepción, se preparó para el nuevo campeonato de la mejor forma que creyó; si bien es cierto, no compró mucho y no se reconfiguró, apenas dos jugadores se marcharon y tres llegaron. 

El movimiento principal fue la salida de Edgar Pérez Greco, al Deportivo La Guaira. El tachirense, que la campaña pasada se consagró como máximo goleador histórico del equipo con 30 dianas, decidió irse por la puerta grande, porque consideró que su ciclo en el rojinegro había culminado. Con esto, emigró otro pilar de aquel Lara campeón en la 2011-2012, que poco a poco termina de desaparecer.

El otro hombre que dejó al equipo fue Juan Guerra, quien se convirtió en un nuevo #VenEx. Lo fichó el Tampa Bay Rowdies, de la North American Soccer League (NASL), una liga profesional de los Estados Unidos y Canadá. Esto fue posible gracias a una cláusula del contrato de Guerra, la cual establecía que si había interés de una franquicia del extranjero, podría ser transferido. Un volante de contención y uno creativo, fueron los puestos donde el Lara debió buscar remplazo. Optó por pescar en la capital y traer a tres caras frescas. Todos de diferentes equipos. 

Como se ve en la imagen, de izquierda a derecha, los nuevos fichajes son:

Cesar González: mejor conocido como "Peluche", aterrizó en tierras larenses para estar, al menos, los próximos dos años. La directiva le pagó la cláusula a Metropolitanos  para hacerse con sus servicios. Su polifuncionalidad será crucial para Dudamel. Se desenvuelve como volante ofensivo o delantero, es rápido, dinámico, y con pegada. Mide 1.73m, pesa 73 kg y nació en Caracas en 1987 (27 años). Les sumará a los larenses más profundidad en el ataque, llegada y posiblemente gol. 

Ely Valderrey: involucrado en la operación de Pérez Greco, proviene del Deportivo La Guaira, estará por un año y medio a préstamo con los crepusculares. El oriundo de Tucupita tiene experiencia en varios equipos del fútbol local, como Aragua, Llaneros, Caracas y Carabobo, además de participar con la selección Sub 20 en los Juegos Centroamericanos en Colombia 2006. En los papeles, Valderrey llega como el recambio más lógico de Pérez Greco: tienen muchas similitudes, excepto en su físico, Ely mide 1,74m, por lo que es más pequeño. Su acoplamiento pudiese ser rápido, ya que ha compartido con muchos jugadores: con 'Peluche' lo hizo en tres equipos. Posee buena pegada, le gusta encarar y es muy vertiginoso. 

Darwin Gómez: llega desde el Deportivo Petare; sí, otro jugador del Petare. Con la llegada de Gómez, los cuatro delanteros del Deportivo Lara, hoy por hoy, provienen del Petare. Firmó por dos años, su arribó al club se esperaba desde hace seis meses, pero por problemas administrativos no pudo llegar. En su arsenal, exhibe grandes diagonales, es veloz, puede jugar por dentro como por fuera del área; es derecho, mide 1,80, tiene 24 años y nació en Upata, Bolivar. Su juventud y ganas de mostrarse serán sus principales virtudes.

No hubo un 'súper fichaje'. Ninguno de los tres es un jugador de renombre en el torneo, lo que no quiere decir que no sean buenos jugadores. Todos son menores de 30 años, algo positivo. La amplitud de las opciones ofensivas en cancha y en el banco, obviamente, aumentan.

La expectativa mayor será ver si logran tapar la ausencia de Greco. Un techo alto. Para hacerlo tendrán que marcar siete goles o más entre los tres.

Por otra parte, respecto a la baja de Juan Guerra, los larenses cuentan en sus filas con Vicente Suanno, Juan Colina y Junior Moreno, para dos puestos en la primer línea de volantes.

Dudamel ya cuenta con sus nuevas adquisiciones, toca ver y esperar si serán suficientes para pelear el torneo, y si las bajas del equipo no afectarán sus objetivos.